Miller: El estrés de los estudiantes universitarios sigue aumentando, conduce a malos hábitos

Jack Miller and Skyler Halopoff

Collegian | Ava Kerzic

Nota del editor: Puedes leer la versión en ingles de este artículo aquí.

Traducción de Skyler Halopoff

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Se ve la universidad muchas veces como un tiempo emocionante con libertades nuevas y la independencia. Sin embargo, durante la década pasada, ha habido un aumento dramático en el número de estudiantes universitarios quienes sienten niveles altos de estrés y ansiedad.

En un estudio dirigido por El instituto Americano del Estrés (The American Institute of Stress), ocho de cada diez estudiantes dijeron que sienten “estrés frecuente” mientras 63 por ciento de estudiantes han reportado niveles altos de ansiedad, según el instituto Americano del Estrés.

Por supuesto, hay factores específicos que inevitablemente causan el estrés. Esto puede incluir el trabajo académico, los estudiantes con sentimientos de nostalgia de hogar o simplemente el cambio abrupto de escenario. Pero, aunque si estos factores siempre han estado presentes en las vidas de estudiantes universitarias, es probable que no expliquen el aumento reciente del estrés o la ansiedad. Entonces, ¿qué causa este aumento alarmante?

“Creo que la causa más grande son las redes sociales,” dijo Riley Ahern, un estudiante del último año en Colorado State University. “Cuando piensas en la cantidad de tiempo que un estudiante universitario promedio pasa en su teléfono cada día, es extraordinario.”

Un estudiante universitario promedio pasa casi dos horas en las redes sociales cada día. No sólo es este tiempo que podría dedicar a sus estudios, sino que esto también los deja
susceptibles a los efectos negativos de las redes sociales, como un miedo de perderse, el
sueño interrumpido y la comparación constante de sí a otros.

Las cargas financieras son otro gran peso que causa estrés para los estudiantes, con los
estudiantes de universidad de pregrado en el proceso de graduarse con un promedio de
$33,448 en deudas de préstamos estudiantiles. El costo de asistir a una universidad es
exponencialmente más alto ahora de lo que era hace 20 o 30 años, y esto fuerza a muchos estudiantes a que trabajen horas largas a la vez que llevan una carga completa del curso.

“La universidad ofrece oportunidades infinitas para los estudiantes; sin embargo, la libertad nueva en la universidad puede llevar a que los estudiantes participen en actividades que pueden dañar su salud mental. Es importante establecer conscientemente los hábitos que le permiten a usted quedarse en control de sus responsabilidades.”

Aunque el estrés siempre se ha presentado en los estudiantes universitarios, las encuestas de los Centros Americanos de Adicción (American Addiction Centers) sugieren que los mecanismos de afrontamiento usados por los estudiantes universitarios hoy en día típicamente perpetúan este estrés en vez de reducirlo.

“A un nivel individual, el proceso de reducir tu estrés será cuestión de sustituir los malos hábitos de afrontamiento con los buenos,” dijo Ahern. “Las redes sociales, el alcohol y las drogas ayudan con el estrés a corto plazo, pero por lo general empeoran la vida con el tiempo.”

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Entonces, ¿qué son los buenos hábitos de afrontamiento para los estudiantes universitarios? Garrison Unis, un estudiante de tercer año en Colorado State University con una especialización en psicología de la adicción, lleva muchos años de experiencia de estudios con este tema en sus clases y en su vida personal.

“Es muy fácil crear un ritmo de depender de los vicios para ayudarte a lo largo de la semana o incluso un día,” dijo Unis. “En particular cuando ingresas por primera vez a la universidad, no hay alguién que te guíe o te diga qué debes hacer, entonces es muy atractivo hacer correcciones a corto plazo.”

Unis participó en estas correcciones a corto plazo hasta que decidió hacer un cambio en su tercer año de la universidad.

“Empezó con pasos pequeños,” dijo Unis. “Antes de acostarme, empecé a escribir una lista de tareas que tenía que cumplir el próximo día. Esto aseguró que no abandonara ninguna de mis responsabilidades y esto me ayudó a sentirme en control de mi vida.”

Después Unis explicó cómo los buenos hábitos empezaron a establecerse el uno tras el otro.

“Dentro de las dos semanas después de mi cambio, establecí una horario consistente de dormir y he empezado a trabajar cada día,” dijo Unis. “Me puse mucho más feliz cuando me volví disciplinado.”

La universidad ofrece oportunidades infinitas para los estudiantes; sin embargo, la libertad nueva en la universidad puede conducir a que los estudiantes participen en actividades que pueden dañar la salud mental. Es importante establecer conscientemente los hábitos que le dan permiso a usted a quedarse en control de sus responsabilidades.

Puede contactar a Jack Miller por letters@collegian.com o en Twitter @millerjack02.